miércoles, 22 de mayo de 2013

La NASA financiará el desarrollo de una impresora 3D de comida

La NASA ha anunciado que financiará con 125.000 dólares un proyecto de investigación basado en el sistema de impresión de alimentos en 3D del ingeniero Anjan Contractor. El éxito de este dispositivo supondría la sostenibilidad de la comida en el futuro en la Tierra y la solución a un gran problema de los viajes espaciales.

 
La NASA financiará el desarrollo de una impresora 3D de comida  
 
El ingeniero mecánico especializado en impresión 3D Anjan Contractor, de la empresa Systems and Materials Research Corporation, pretende dar un giro de 180 grados en el mundo tecnológico con una impresora generadora de alimentos. La NASA ha invertido 125.000 dólares en este proyecto de investigación en el que el ingeniero se haya inmerso y que se llevará a cabo durante los próximos seis meses.
Esta impresora contaría con un sistema de cartuchos compuestos por polvos de proteínas, azúcares, carbohidratos, etc, que en combinación  con aceites y líquidos formarían la base de los ingredientes de las comidas. Esta peculiaridad permitiría a todos los consumidores elaborar su propia dieta, adaptándola a sus características metabólicas, siendo por tanto un descubrimiento que podría cambiar nuestro estilo de vida.

5 comentarios:

  1. La NASA como siempre, está por encima de los demás. Es alucinante que se pueda imprimar comida y supuestamente en un futuro, no muy lejano como dice en la noticia.No me parece mal que se investigue y se inviertan miles de dólares en proyectos como estos para salir del planeta o cambiar nuestro estilo de vida a base de la comida, aunque personalmente pienso;¿para que queremos encontrar vida fuera, si apenas podemos cuidar de nosotros mismos? Se que en estas cosas hay que invertir pero me gustaría que tecnologías como estas llegasen a los países subdesarrollados y se acabase el hambre en el mundo. Se que por desgracia no es fácil, pero se debería de hacer un esfuerzo.

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  2. Un proyecto esperanzador sin duda alguna, pero habrá que esperar a que su gestación finalize para ver loa costes que acarrea. Costes de los cuales depende su continuidad en el futuro

    Porque como ya hemos dicho aquí muchas veces lamentablemente la industria alimenticia la mueve el dinero, no el beneficio del consumidor.

    Que este proyecto sea un paso importante en nuestros hábitos alimentarios sirve de poco si no sale rentable mantenerlo, asi que recemos para que no sea esta otra gran idea tirada a la basura



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  4. Esto es una nueva demostración de las maravillas que consigue hacer la ciencia hoy en día.
    Sin embargo,creo que no deberíamos centrarnos tanto en el tema económico como lo ha hecho mi compañero Javier Sendra sino pensar en las ventajas y nuevas puertas que nos abre este tipo de inventos.Las dietas de los astronautas mejorarían notablemente (gran problema hoy en día )y la dieta en la Tierra se ajustaría adecuadamente a nuestro metabolismo,reduciendo probablemente enfermedades de sobrepeso y cardiovasculares. De momento no se me ocurre ningún punto negativo a este gran avance aunque quizás tendriamos que dejar que el tiempo y los hechos nos lo demuestren.

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  5. La cuestión es hasta que punto es novedad la impresión de comida.

    Porque una cosa es imprimir un chuletón a partir de proteínas, enzimas, etc a nivel molecular, para crear con materia muy básica todo tipo de platos, pero tener cuatro ingredientes y una máquina que te los coloque bonito sobre un plato no soluciona nada. Técnicamente, a efectos de alimentación, sería menos engorroso meter la cuchara directamente en el cartucho y taca, a comer.

    Lo que hay ahora no se diferencia mucho a fabricar pienso prensado para perros. Puede ser comida nutritiva y barata, y eso sería un logro, pero de ahí a recrear comida tal y como la conocemos falta mucho realmente.

    Para hacer una máquina que imprima comida real, se necesitaría crear un constructor universal capaz de recrear incluso diferentes tipos de células a partir de elementos básicos y para eso, aun quedan unas cuantas décadas.

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